EN EN LÍMITE DE LA CASA DEL PADRE

LOS CRISTIANOS NOS HEMOS OLVIDADO DE ALGO PRIMORDIAL EN NUESTRA FE: ESTE MUNDO ES UN PUENTE HASTA LA CASA DEL PADRE. HAY UN MÁS ALLÁ DE LA MUERTE Y HAY UN ALMA INMORTAL. Y LA CIENCIA,LA MEDICINA,LA NEUROCIENCIA Y LA MECANÍCA CUÁNTICA NOS DICEN QUE ES CIERTO.
EXPERIENCIAS CERCANAS A LA MUERTE CONTADAS POR SUS TESTIGOS Y ANÁLISIS DE DICHAS EXPERIENCIAS DESDE UN PUNTO CIENTÍFICO Y ESPIRITUAL.

EVIDENCIAS DE LA SEPARACIÓN DE CEREBRO Y MENTE-CONSCIENCIA







ESTE TEXTO HA SIDO RECOGIDO DE LA EDICIÓN EN ESPAÑOL DEL DIARIO CHINO "LA GRAN MURALLA"



Personas con graves desórdenes mentales se vuelven lúcidas misteriosamente justo antes de morir

Para el Dr. Haig, es claro que la mente existe aparte del cerebro. Otros buscan razones fisiológicas posibles para este fenómeno conocido como “lucidez terminal”.

Personas con esquizofrenia, Alzheimer y otras condiciones que causan un deterioro grave de las funciones mentales, ocasionalmente recuperaron de manera inexplicable la memoria y la claridad mental poco antes de morir. Su mente parece sorprendentemente volverse completamente coherente, incluso cuando su cerebro se deterioró más que en otro momento.
Pacientes que ni siquiera recordaban su propio nombre durante años pueden reconocer repentinamente a sus familiares y tienen conversaciones normales con ellos sobre el pasado, presente y futuro. Nadie sabe cómo sucede.
Pacientes que ni siquiera recordaban su propio nombre durante años pueden reconocer repentinamente a sus familiares y tienen conversaciones normales
Por ejemplo, el médico Scott Haig, escribió en un artículo para la revista Time sobre un paciente joven llamado David, que a pesar de tener tumores en su cerebro, tuvo momentos lúcidos antes de morir. David dejó de hablar y moverse en las semanas anteriores a su muerte. Cuando se escaneó su cabeza, “casi no quedaba cerebro”, explicó el Dr. Haig. Pero en la noche que murió, paso cinco minutos completamente consciente despidiendo a su familia.
“No fue el cerebro de David lo que lo despertó para despedirse”, dijo el Dr. Haig. “Su cerebro ya había sido destruido. La metástasis del tumor no solo ocupa espacio y presiona cosas, dejando un cerebro completo. La metástasis en realidad remplaza tejido… El cerebro simplemente ya no está”.
“Lo que despertó a mi paciente… fue simplemente su mente, forzando su camino a través de un cerebro roto, el acto final de un padre para consolar a su familia”.
Para el Dr. Haig, es claro que la mente existe aparte del cerebro. Otros buscan razones fisiológicas posibles para este fenómeno conocido como “lucidez terminal”.
Los estados psicológicos variables de las personas que pasan por la lucidez terminal sugieren que no es solo un mecanismo el responsable, afirman los investigadores de la Universidad de Virginia y la Universidad de Iceland, quienes publicaron “Lucidez terminal: Un resumen y una colección de casos” en los Archivos de Gerontología y Geriatría en 2012.
“En la actualidad, pensamos que no es posible formular mecanismos definitivos para la lucidez terminal”, escribieron los investigadores Dr. Michael Nahm, Dr. Bruce Greyson, Dr. Emily Williams Kelly, todos de la Universidad de Virginia; y el Dr. Elendur Haraldsson de la Universidad de Islandia. “La lucidez terminal en diferentes desórdenes mentales puede resultar de diferentes procesos, dependiendo de la etiología de las enfermedades. Por ejemplo, la cahexia [debilidad y desgaste del cuerpo] en pacientes con enfermedad crónica podría causar disminución del tejido cerebral, aliviando la presión ejercida por las lesiones que ocupan el espacio intercraneal y permitiendo el retorno fugaz de algunas funciones cerebrales”.
Algunos pacientes a quienes se les retiró el soporte vital, manifestaron un surgimiento transitorio de la actividad eléctrica del cerebro. — Dr. Michael Nahm, et al.
También señalaron que “algunos pacientes a los que se les retiró el soporte vital, pudieron manifestar un surgimiento transitorio de la actividad encefalográfica [actividad eléctrica del cerebro] cuando la presión sanguínea se pierde inmediatamente antes de la muerte. Aunque no se reportó que estos pacientes mostraron evidencia clínica de cognición, los descubrimientos sugieren que la neurociencia de estados terminales podría ser más compleja de lo que se pensaba tradicionalmente”.
Incluso si algunas partes del cerebro se reactivan a través de una liberación de presión o una sobrecarga eléctrica, es difícil imaginar cómo un cerebro tan gravemente dañado (o casi inexistente, como en el caso de David) podría permitir que una persona remitiera coherentemente recuerdos y se comunicara. En algunos casos, es como si toda la mente hubiese vuelto intacta. La Gran Época preguntó a algunos investigadores de la Universidad de Virginia de la División de Estudios de percepción, incluyendo al coautor del estudio Dr. Greyson, ¿cómo podría un cerebro dañado producir la impresión de una mente tan completa en casos de lucidez terminal. Es una buena pregunta, dijeron, pero que no podían responder.
La lucidez terminal era bien conocida en la medicina del siglo XIX, señaló Nahm y sus co-autores. Pero está casi ausente en la literatura médica del siglo XX. Ellos revisaron 83 casos mencionados en la literatura en los últimos 250 años. El estudio fue conducido con la esperanza de entender aún más la relación mente-cerebro. Los investigadores también dicen que el entendimiento de la lucidez terminal podría ser útil para ayudar a desarrollar tratamientos.
El entendimiento de la lucidez terminal podría ser útil para ayudar a desarrollar tratamientos.
Por ejemplo, el médico austríaco Julius Wagner-Jauregg (1857-1940) observó que los síntomas de locura mental a veces disminuyen durante la fiebre alta. Desarrolló terapia de fiebre para demencia paralítica (un desorden neuropsiquiátrico que afecta el cerebro), lo que le hizo ganar el Premio Nobel de Medicina.
El Dr. Alexander Batthyany, profesor en el departamento de ciencia cognitiva de la Universidad de Viena, ha estado estudiando la lucidez terminal en los últimos años. Los hallazgos de un estudio reciente fueron presentados en la Conferencia de la Asociación Internacional para Estudios Cercanos a la Muerte de 2014 (IANDS).
Se encuestó a 800 trabajadores cuidadores de personas, de los cuales solo 32 respondieron. Estas 32 personas brindaron cuidado a 227 pacientes de Alzheimer o demencia. Alrededor del 10 por ciento de estos pacientes tuvo un breve y repentino regreso a la lucidez. El Dr. Batthyany advirtió, sin embargo, que estos cuidadores fueron auto seleccionaron. La tasa baja de respuesta podría significar que el fenómeno es raro, y que recibió respuestas principalmente de aquellos que sí habían sido testigos de lucidez terminal en sus pacientes. No obstante, ser testigo de lucidez terminal tuvo un gran impacto en algunos de estos cuidadores.
Uno de ellos dijo: “Antes de que esto sucediera, era bastante insensible con las personas en estado vegetal a quienes cuidaba. Ahora entiendo que estoy cuidando bebés de la inmortalidad. Si hubieras visto lo que yo vi, entenderías que la demencia puede afectar el alma, pero no destruirla”.
Los siguientes son algunos casos recolectados por el Dr. Batthyany y por los investigadores de la Universidad de Virginia.

Casos de lucidez terminal

“Una mujer anciana con demencia, casi muda, ya no reconocía a la gente… Sorpresivamente, un día, llamó a su hija y le agradeció por todo … [ella] se comunicó por teléfono con sus nietos, intercambió con amabilidad y calidez y se despidió, y un poco más tarde falleció”, según la presentación del Dr. Batthyany en la conferencia IANDS.
El Dr. Nahm y sus colegas escribieron sobe un caso de 1840 publicado en un texto médico: “Una mujer de 30 años diagnosticada con “melancolía errabunda”  fue internada en un asilo, y poco después se volvió maníaca. Por cuatro años vivió exclusivamente en un estado confuso e incoherente de la mente. Cuando se sentía enferma con fiebre, se rehusaba fuertemente a tomar medicina… Su salud se deterioró rápidamente. Pero cuanto más débil se ponía su cuerpo, su condición mental mejoraba más. Dos días antes de morir, se volvió completamente lúcida. Hablaba con un intelecto y claridad que parecía exceder su educación pasada. Preguntaba sobre la vida de sus parientes, y en llanto se lamentaba de su comportamiento previo hacia la toma de medicina. Murió poco después”.
Otro caso contado por el Dr. Nahm fue registrado por A. Marshall en el libro de 1815 “La mórbida anatomía del cerebro en la manía y la hidrofobia”. Marshall (1815) reportó un caso de un paciente demente y furiosamente violento que sufría de pérdida de la memoria al grado que ni recordaba su propio nombre. Cuando cayó gravemente enfermo luego de más de 10 años en el asilo, se empezó a calmar. El día de su muerte, se volvió racional y pidió ver al sacerdote. Parecía escuchar atentamente al ministro y expresó su esperanza de que Dios tendría piedad de su alma. Aunque Marshall (1815) no describió el estado mental del paciente en mayor detalle, su informe sugiere que el hombre había accedido de nuevo a los recuerdos de su vida”.
El universo está lleno de misterios que desafían nuestro conocimiento actual. En “Explorando Enigmas” La Gran Época recoge historias sobre estos extraños fenómenos que estimulan la imaginación y abren posibilidades inimaginables. ¿Son verdad? Usted decide.

NUEVAS EVIDENCIAS DE EXPERIENCIAS EXTRACORPORALES

ESTE TEXTO ESTÁ RECOGIDO DE LA EDICIÓN EN ESPAÑOL DEL DIARIO CHINO "LA GRAN MURALLA"


Reconocido cirujano prueba que el alma puede dejar el cuerpo en una experiencia cercana a la muerte

El paciente describió con precisión acontecimientos que no pudo haber visto, porque sus ojos fueron cubiertos para proteger su córnea durante la operación
Experiencia cercana a la muerte
Investigadores holandeses de experiencias cercanas a la muerte o ECM, recopilaron más de 70 casos de personas que supuestamente salieron de sus cuerpos y observaron escenas que no podrían haber sido percibidas con sus sentidos físicos.
Los detalles que ellos vieron, (por ejemplo, las acciones realizadas por personas en el hospital) podrían ser verificadas, proporcionando tal vez algunas de las pruebas más sólidas acerca de la habilidad mental para existir fuera del cerebro.
Tito Rivas, Anny Dirven, y Rudolf Smit, publicaron esta recopilación en un libro titulado “Wat een stervend brein niet kan” (“Qué no puede hacer un cerebro al morir”). Ellos están buscando financiamiento para traducir el libro del holandés al inglés. Por el momento La Gran Época ha traducido algunos de estos casos a ser revisados.
En un caso reportado por el cardiólogo cirujano Lloyd W. Rudy (1934-2012), un paciente fue declarado muerto durante al menos 20 minutos, e inusualmente volvió a la vida. No sólo que fue inusual su regreso a la vida, sino que lo que narró acerca del tiempo en que estuvo muerto desafía la explicación convencional.
El Dr. Rudy se graduó de la Universidad de Washington, Escuela de Medicina, y fue decano de “Heart Program” en la Universidad de la Escuela de Medicina de Georgia, asimismo, fue miembro del primer equipo de trasplantes de corazón en la Universidad de Stanford. Un día de Navidad, Rudy y su asistente Roberto Amado-Cattaneo realizaron una cirugía para reemplazar una válvula cardíaca infectada.
El paciente sufrió de un aneurisma causado por una infección, y luego de terminada la cirugía, el paciente no sobreviviría sin un soporte de vida.
Más tarde, la situación del paciente se volvió desesperada y los cirujanos escribieron un certificado de defunción, informaron de la muerte a su esposa y apagaron las máquinas.
“Por una razón u otra, se habían olvidado de apagar el aparato que mide las funciones corporales, tales como la presión arterial”, escribieron los investigadores. “Además, antes de  declarar que el paciente no pudo ser salvado, habían introducido un tubo largo con un micrófono en un extremo de su cuerpo para obtener una impresión precisa de ciertas funciones corporales como los latidos de su corazón”.
“Rudy y su ayudante ya se habían cambiado de ropa. Ambos se habían quitado las chaquetas, los guantes y las máscaras, y permanecían cerca de la puerta. Estaban hablando de lo que pudieron haber hecho y qué medicamentos pudieron haberle administrado al paciente para salvarlo”.
“Habían pasado como 20 a 25 minutos desde que el paciente había sido declarado muerto. De repente, pareció haber algún tipo de actividad eléctrica (...). Rudy y su asistente pensaron que había sido algún tipo de convulsiones del corazón, pero la actividad aumentó y dio lugar a un latido del corazón, primero lento y luego más rápido”.
No se había hecho nada para revivir al paciente desde que fue declarado muerto, él revivió espontáneamente. Al paciente le tomó un par de días recuperar su conciencia, logró una recuperación completa sin ningún signo de daño cerebral.
Amado-Cattaneo dijo: “Yo he experimentado varias veces que la gente se recupera de un shock largo y profundo, pero estas personas todavía estaban vivas, mientras que en este caso el hombre ya había muerto”.
Como otras muchas personas que informaron salir del cuerpo durante una ECM, el paciente describió una luz brillante al final de un túnel. Observó los acontecimientos en el hospital, sin embargo, eso intriga a quienes buscan verificar científicamente las ECM.
Vio a Rudy y a Amado-Cattaneo conversando, describió con precisión el lugar que ocupaban en la habitación y la forma en que permanecieron con los brazos cruzados sobre el pecho; vio al anestesiólogo entrar en la habitación. Lo más interesante fue que vio el monitor de la computadora de una enfermera, con una fila de notas pegadas una encima de la otra. De hecho, la enfermera había anotado estos mensajes telefónicos para Rudy y los había pegado de esta forma.
Los autores escribieron: “Rudy señala que el paciente no pudo haber visto las notas antes de la operación, ya que en ese momento no hubo ninguna llamada sin respuesta. Obviamente, la forma en que las notas estaban pegadas una sobre la otra en la parte superior del monitor no era común, y el paciente no pudo haber acertado al azar sobre cómo la enfermera había pegado esas notas en este caso.
“Rudy concluye que el paciente realmente debió haber estado situado por encima de su cuerpo, sino no habría podido describir la habitación y lo demás. Por eso, conjetura que no son explicaciones realistas decir que se debió a una coincidencia o a un previo conocimiento”.
Amado-Cattaneo tampoco pudo explicar el fenómeno. Confirmó que el paciente describió con precisión acontecimientos que no pudo haber visto, porque sus ojos fueron cubiertos para proteger su córnea durante la operación.
Las máquinas de monitoreo de sus signos vitales funcionaban bien, su corazón se había detenido y no mostró signos de respiración durante al menos 20 minutos. Sin embargo, Amado-Cattaneo no pudo recordar el nombre del paciente, y Rudy ya había muerto cuando Rivas y sus compañeros investigadores observaron el caso. Ellos trabajaron con el testimonio de Rudy a partir de un video publicado en YouTube.
En un artículo publicado en la Revista Estudios Cercanos a la Muerte, Rivas y Smit escribieron al respecto: “Por supuesto, este caso estaría completo si  pudiera establecerse la identidad del paciente, para que los registros médicos puedan ser examinados; pero a menos que Amado -Cattaneo recuerde el nombre, dicha investigación adicional no es factible”.
Sin embargo, en nuestra opinión, esta imperfección reduce sólo ligeramente, pero de ninguna manera lo niega, el caso es una evidencia seria para las AVP [percepción verídica aparentemente no física, un término dado a la percepción que debió ser imposible, sobre la base de la condición y posición del cuerpo físico de quien la experimenta]”.
Rivas y Smit concluyeron su documento diciendo: “Consideramos que la acumulación de tal evidencia anecdótica está incrementando la dificultad para descartar de plano este tipo de casos”. 
El universo está lleno de misterios que desafían nuestro conocimiento actual. En “Explorando Enigmas” La Gran Época recoge historias sobre estos extraños fenómenos que estimulan la imaginación y previamente abren a inimaginables posibilidades. ¿Son verdad? Tú decides.

LOS DELOKS



Un fenómeno curioso, poco conocido en Occidente, pero familiar para los tibetanos, es el delok. En el Tíbet,Delok significa "volvió de la muerte", y tradicionalmente deloks son personas que aparentemente "mueren" como resultado de una enfermedad, y se encuentran viajando en el bardo - uno de los muchos estados de vida futura de los budistas tibetanos. Visitan los reinos infernales, donde son testigos del juicio de los muertos y el sufrimiento del infierno, ya veces van a paraísos y reinos de Buda. Pueden ir acompañados de una deidad, que los protege y explica lo que está sucediendo. Después de una semana el delok es enviado de vuelta al cuerpo con un mensaje del Señor de la Muerte para los vivos, instándolos a la práctica espiritual y una forma beneficiosa de la vida. A menudo los deloks tienen grandes dificultades para hacer creer su historia, y pasan el resto de sus vidas que relatan sus experiencias a los demás con el fin de atraerlos hacia el camino de la sabiduría. Las biografías de algunos de los deloks más famosos, como el Dawa Drolma, uno de los grandes lamas del siglo. A la edad de 16 años cayó enfermo y murió, pero regresó a su cuerpo después de cinco días. Para el beneficio de los demás grabó todos los detalles de sus experiencias en el bardo y reinos puros. Las experiencias de deloks  a menudo eran cantadas en todo el Tíbet por juglares itinerantes. La experiencias de los deloks fueron, sin duda,las que hicieron nacer el "Libro Tibetano de los Muertos". En accidentes y enfermedades que les producían un estado de cercanía  a la muerte, tenían lo que hoy llamamos ECM y una sociedad receptiva como el Tíbet las puso por escrito.

Otro ejemplo  es el de Lingza Chokyi, que fue un famoso Delok que vivió en el siglo XVI. En su biografía, cuenta cómo  no se dio cuenta que estaba muerto y cómo se encontró fuera de su cuerpo. .Frenéticamente trató en vano de comunicarse con su familia, ya que se dedicó a los negocios de las prácticas de su muerte. El se enfureció con ellos cuando no le hicieron caso  y no le daban un plato de comida. Al final refresó, para contar su experiencia en el Reino de la Luz.

Sin duda alguna, el "Libro Tibetano de los Muertos" se creó y se nutrió a través de las experiencias que, quizás durante siglos, hombres y mujeres del antiguo Tibet contaba cuando tenían lo que hoy conocemos como Experiencia Cercana a la Muerte. Y que la tradición budista hizo que dicgo libro se compusiese como un tratado religioso, con el "bardo y sus diferentes "reinos" y entidades espirituales que aparecen en el. Pero quedó el núcleo central de toda ECM: la experiencia extracorporal y el encuentro con una Luz llena de gloria que inunda por completo al que la ve. Extremadamete interesante que lo que se vive en cualquier hospital moderno en nuestra época sea lo mismo que se podía vivir hace 3.000 años en el Tíbet.

ENTREVISTA A PIM VAN LOMMEL

  • Patrocinado pPim van Lommeués de la muerte (EDM)Victor-M Amela, Ima Sanchís, Lluís Amiguet 

Esta entrevista fue publicada a los cuatro días de morir mi tío. Siempre he pensado que era una caricia del Absoluto en esos momentos difíciles para mi, en que dicha muerte me pilló en un momento delicado de mi vida. Esta entrevista es para mi una mezcla de regalo y de recuerdo de que no debo ver la muerte como una noche que nunca se acaba...


"Cuando mueres sólo cambias de conciencia"
Foto: Frank Muller
LLUÍS AMIGUET
Aceptar
La ciencia ignora o niega cuanto no puede explicar, pero eso no quiere decir que no exista. La vida del doctor Van Lommel es una apuesta por la verdad, por muy inexplicable que parezca, más allá del camino trillado de la ortodoxia. Han pasado diez años desde que hablamos, pero al estrechar su mano en el aeropuerto de Amsterdam (viene de conferenciar en Atlanta) me sonríe como a un viejo amigo y experimento una íntima sensación de paz y seguridad. El doctor Van Lommel se ha asomado al otro lado sin dejarse en éste el sentido común y lo que ha visto es bueno, aunque, para dominarnos, nos hayan infundido el miedo a verlo. Aceptarlo es aceptarnos y sentirse mejor.

Cuando enseñaba Cardiología en el hospital de Arnheim -800 camas- ya investigaba cómo algunos pacientes, tras infarto y muerte clínica, volvían a vivir.

...
Hasta que en 1986 leí el testimonio de un estudiante de Medicina, George Ritchie, que resucitó tras nueve minutos de muerte clínica. Me impresionó tanto que empecé a estudiar en profundidad esos casos.

¿Tantos había?
En 1988 ya tenía doce episodios incuestionables y creé una red de investigación con otros diez hospitales holandeses. Iniciamos un estudio clínico prospectivo de 344 pacientes, que publicó The Lancet (2001).

Causó un impacto mundial.
Tanto que ya le avancé entonces, cuando usted me entrevistó, que, tras 31 años de cardiología, me iba a dedicar en exclusiva a las experiencias cercanas a la muerte (EDM).

¿Qué hemos aprendido desde el 2001?
Tenemos más preguntas, además de la clásica: ¿si la conciencia es un mero producto del cerebro, cómo puede sobrevivir y explicar la experiencia de la muerte?

¿Qué dice la ortodoxia médica?
Que se trata de meras alucinaciones causadas por la anoxia (carencia de oxígeno).

¿Y qué le dice su investigación?
Si la causa fuera la anoxia, todos los que vuelven a la vida tras la muerte tendrían EDM, porque todos la sufren, pero, en cambio, sólo el 18% tiene esas experiencias.

¿Qué explican sobre ellas?
Coinciden en hablar de recuerdos, cognición y emociones y mantienen la identidad, un punto crucial, porque el ego es el enlace entre la conciencia y el cuerpo.

¿Luces, voces, su vida en un instante...?
Las han experimentado miles de personas, pero no todos las explican por temor a ser tachados de lunáticos o porque creen que las causan la medicación o la enfermedad.

¿Todos experimentan lo mismo?
No todos experimentan todo, pero todos citan algunas experiencias recurrentes que coinciden en un cruce espacio-temporal.

¿A qué se refiere?
Es la revisión de la vida pasada, pero también la futura y presente: algunos, al volver, anticipan sucesos y reinterpretan los ya pasados, así que suelen cambiar de pareja, de trabajo, de existencia, porque han contemplado su vida en conjunto durante su EDM.

¿Cómo son esas visiones?
Inefables, a menudo el lenguaje carece de términos para explicarlas. Una EDM de tres minutos puede requerir semanas de testimonio en el que no se repite un solo episodio. El tiempo, como le decía, transcurre de un modo único en síntesis con el espacio y una constelación de familiares y afectos.

Por ejemplo.
Un paciente refiere cómo en su EDM había visto a un señor desconocido sonriéndole. Diez años después, su madre agonizante le reveló que él era hijo de una relación extramarital y le mostró una fotografía de su padre biológico, asesinado en un campo de concentración: era aquel señor sonriente.

¿Cómo sabe que esos pacientes clínicamente muertos siguen conscientes?
Lo prueban cientos de casos. En Conciencia más allá de la vida explico el de un hombre de 43 años que nos llegó cianótico, frío, sin tensión y con las pupilas dilatadas. La enfermera le extrajo la dentadura postiza y la depositó en un cajón. Resucitó inexplicablemente tras un largo coma y preguntó por sus dientes.

Si estas vivo, resultan muy útiles.
Reconoció, al verla, a la enfermera y le pidió que se los devolviera. Ella nos llamó alarmada y entonces el paciente nos relató en detalle lo que habíamos dicho y hecho cuando llegó muerto a urgencias del hospital.

¿Y usted qué cree?
Nuestra conciencia no es más que un retransmisor para esta dimensión de nuestro ser en varias. Es como una radio que, mientras vivimos aquí, sintoniza con este universo. Nuestra muerte sólo es un cambio de conciencia, una transición. Sólo morimos en una dimensión para pasar a otras.

¿Es una convicción religiosa?
Es física cuántica. Yo no soy creyente. Muchas religiones se han acercado a esa realidad con técnicas de paso entre esas dimensiones, como la meditación o el misticismo.

¿Cómo lo sabe?
Porque estudio casos -me consultan decenas cada día- y las experiencias son recurrentes y concurrentes: confluyen tiempo -pasado, presente y futuro: tienen visiones- y espacio en sensación de unidad.

...
Y esos testimonios de cada día coinciden con los relatos de la mística y las visiones de profetas, gurús y santos desde hace siglos.

¿Todo está conectado?
Ven la luz (los niños me cuentan que un ángel; los ateos hablan de "una energía" y los creyentes, de Dios). Todos se refieren a lo mismo y que en ello se sienten integrados.

¿Por qué la ciencia lo ignora?
Hasta ahora, la mecánica cuántica demuestra que la luz consta de partículas que al mismo tiempo son ondas -creo que nuestra conciencia las retransmite- dependiendo del estado del observador.

La experiencia de lo objetivo, al fin, depende de tu estado subjetivo.
Así que, desde los gurús milenarios hasta los físicos cuánticos, cuando asumes tu transición sin miedo experimentas un anticipo de esa sensación de plenitud.